El sector de la construcción avanza hacia su industrialización

El 11 de noviembre tuvo lugar la primera de las dos sesión de las Jornadas Técnicas de Industrialización organizadas por InMat by Ciare. Más de 200 personas asistieron a la sede de Cuatrecasas, en Madrid, para abordar temas como normalización, legislación, comercialización, financiación y diseño. Todo un éxito que nos da el pulso de un sector que comienza a transformarse.

Las jornadas, impulsadas por Fernando Catalán de Ocón y el despacho de abogados Cuatrecasas han sido una oportunidad para analizar, con la intervención de expertos y responsables de diferentes Administraciones, los retos y las últimas tendencias, tecnologías y casos de éxito que están revolucionando nuestra forma de diseñar y construir. Proarquitectura es el media partner del evento, que forma parte de una serie de eventos profesionales, como antesala de un segundo Congreso en los primeros meses del año próximo.

Apoyo institucional

En la inauguración de las Jornadas, Julio Brasa, socio de urbanismo en Cuatrecasas señaló que la construcción industrializada es parte de la solución y cómo su estandarización es básica. Además se está estudiando retocar la Ley de Ordenación de la Edificación, LOE. “En procesos de cambio es necesario oír a los protagonistas”, de ahí estas jornadas para las que agradece el apoyo de las Administraciones.

Fernando Catalán de Ocón, presidente ejecutivo de Grupo Ciare, Conocimientos Imprescindibles de Arquitectura y Real Estate, indicó que “se le ha caído la venda al sector inmobiliario con la construcción industrializada”. Catalán señaló que hay tejido industrial si bien se mostró preocupado por el problema de capacidad del sector por lo que se necesita ir mano a mano con el Ministerio así como que fluya la financiación. Por último destacó cómo estas jornadas, a las que podrían haber triplicado la asistencia, son complementarias a las grandes ferias del sector e intentan dar voz a los prescriptores y tener una visión de hacia dónde va el sector; de ahí que se plantee para los primeros meses de 2025 una 2ª edición del Congreso para presentar casos de éxito. Desde su punto de vista ya se puede hablar de industria de la construcción y cómo éste es uno de los principales retos de la arquitectura en nuestro tiempo.

Una gran problemática: vivienda asequible

Anselmo Menéndez, subdirector General de Política y Ayudas a la Vivienda, MIVAU, Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana, incidió en la problemática de una vivienda asequible, lo que requiere incrementar la oferta y que compete a todos los estamentos. Esto, señaló, debe venir acompañado del apoyo de la Administración y se deben generar foros de debate como este dado que surgen dudas: para el desarrollo de la construcción industrializada parece que no es preciso cambiar la Ley hipotecaria y hay dudas si se debe modificar la LOE; en los cambios que se están produciendo de la Orden ECO, sí que hay cambios que afectan a la construcción en general y se incluye el concepto medioambiental y la asunción de riesgos. Menéndez finalizó indicando que la Administración está, estará y apoyará la construcción industrializada.

José María García, viceconsejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, indicó que como estamos en pleno proceso de transformación; de ahí el éxito de estas jornadas. Hizo historia y recordó que hace cuatro años la construcción industrializada era poco comprendida. “Ahora hay que superar tensiones, cambiar el statu quo y apostar por la industrialización de la construcción porque si no colapsará la producción de viviendas, en donde se está dando un proceso de infraproducción, dado que apenas se están haciendo 100.000 viviendas al año. Ese es el camino y estas jornadas nos dan las claves. El sector hay que transformarlo, ya no existen determinados perfiles y se va a dar la ausencia de profesionales. Además es necesaria la calidad, como proceso continuo y producto final. Estamos en la búsqueda de la eficiencia: para un nuevo producto hay que construir de otra manera y esta solo puede ser mediante construcción industrializada”, señaló. Así mismo hizo referencia al apoyo de la Comunidad a esta forma de construir, que es parte de la necesaria Colaboración Público-Privada (CPP) en varias acciones como el Plan Vive, con más de 3.000 viviendas construidas totalmente con sistemas de construcción industrializada y otras 5.000 con algún elemento industrializado, lo que permite dar respuesta a un modelo de negocio en dos años (no en tres). Así mismo la Administración regional de Madrid impulsa el ‘hub de industrialización’, para atraer mucha industria donde hay que producirla y que conviva en un entorno colaborativo y sinergias; generar un espacio para que los industriales convivan. Por último destacó que la Comunidad van a desarrollar la CPP con la construcción de 40 residencias de mayores con estos sistemas constructivos, movilizando 40 suelos.

Un enfoque dual para la industrialización

García finalizó indicando que todo esto se debe completar con la formación profesional (FP) y que la capacitación en construcción industrializada debe ir por otra vía, con un enfoque dual, con la empresa, para atraer nuevos talentos y trabajar en la otra cara de la moneda: incrementar la oferta. Así mismo se precisa flexibilizar el urbanismo (importante línea de negocio), que sea un motor, con una Ley del suelo de la Comunidad que facilite el cambio de usos, en este campo, y para lo que la industrialización también pueda dar respuesta a la regeneración urbana.

Isabel Calzas, directora General de Vivienda y Rehabilitación del Ayuntamiento de Madrid, señaló que la industrialización es hablar de menos residuos y digitalización. En este proceso de cambio es fundamental el papel de las Administraciones, la conexión con la ciudadanía y desarrollar una función ejemplarizante con buenas prácticas. “En el Ayuntamiento apostamos por la innovación y la calidad de vida de los ciudadanos: la construcción industrializada permite incrementar la oferta en menos tiempo y hacer en Madrid la mayor oferta de vivienda pública, a la vez que cumplir con la Directiva EPBD y los requisitos de neutralidad climática”, indicó. Además, hizo referencia a cómo la EMVS, siempre referente en innovación, ha puesto la primera piedra de una promoción de 58 viviendas públicas con construcción industrializada en madera, en Barajas.

Para Calzas esto no va solo de la fase de producción, sino también en el diseño, con nuevos esquemas de pensamiento aparte de las ventajas propias de esta forma de construir adaptadas a nuevas formas de vida a las que tenemos que dar respuesta, con viviendas inclusivas y resilientes.

¿Por qué industrializar la construcción?

La primera de las mesas redondas abordó las ventajas y experiencia-cliente con ejemplos. Estuvo moderada por José María Quirós, Director de Industrialización de Aedas Homes.

Antonio Martín, presidente y CEO de Grupo Avintia señaló que hace cinco años hicieron una prueba piloto. “La construcción industrializada es un reto en el que falta concienciación; pero es el futuro y empezamos un camino. No concebimos industrialización sin un grupo industrial, hay que encajarlo económicamente, ser eficientes y controlar la cadena de valor, es un proceso de mejora continua para competir (hoy vale un 30% más)”.

Un momento transformador

Javier Sargüés, director General de Arpada, indicó que la construcción industrializada no es la que puede resolver el problema de la edificación en un 100%, si bien ha llegado y está para quedarse. Como empresa de servicios analizan todo y quieren pasar por el proceso completo, para ofrecer al cliente el mejor proyecto sin casarse con un producto. Destacó que estamos en un momento de transformación en el que hay que dar importancia a la formación en construcción industrializada, especialmente a nivel Universidad.

Luis Ilundaín, CEO de VN System, expuso cómo hace 15 años se dedicaron a viajar a otros países para conocer y aprender de producciones robotizadas, carruseles y todo digitalizado. Así se atrevieron a hacer inversión en un carrusel que les permite producir 60 unidades al año (han multiplicado por tres la producción) y uno de sus principales mercados es Francia. Para Ilundaín la industria ya está en el camino, existe ilusión, se necesitan grúas grandes, elementos auxiliares y todo, bajo en carbono.

Michel Elizalde, presidente y CEO de ACR, también indicó una experiencia similar, analizando hace cinco años lo que se estaba haciendo fuera, viendo hacia dónde ir, qué sistemas incorporar, valorando opciones, incluso de montar una planta. Su estrategia: apostar por el sistema CREE hibrido madera-hormigón, con una estrategia más gradual y de apoyo en sus socios. Expuso como con el uso de su sistema, en una promoción, han sido capaces de montarlo con un 30% menos de personal, lo que evita el principal problema al que se enfrentan las constructoras (de falta de mano de obra).

La industrialización genera oportunidades de negocio

Higini Alfageme, vicepresidente ejecutivo de Precast Global Business, Molins, multinacional en 11 países y con cinco negocios, indicó que cuentan con varias fábricas lo que les permite llegar a más sitios en un radio de 200 kilómetros (un límite importante para el transporte), así como que con su experiencia en prefabricado de hormigón desde hace 30 años les permite ir a la edificación residencial, con una industrialización que ya es una realidad y que genera oportunidades de negocio. Su estrategia ha sido apostar por un sistema propio (tras viajar y adaptar a la realidad de aquí) que les permite hacer la “caja completa”, estructura y que no es un sistema acabado. La intención es integrar, incorporando elementos que el edificio requiere. En este proceso, señaló, hay aun pocas mujeres pero los sistemas lo permiten al igual que se mejora la calidad del trabajo de sus trabajadores; se sienten orgullosos de esto. Para Alfageme las Administraciones deben olvidar los objetivos aspiracionales porque generan frustración y este proceso de cambio debe darse entre todos, ser colaborativo y asumiendo riesgo.

El desafío de la industrialización

José Manuel Villanueva, Co-Founder y CEO de 011h expuso que en 2016 tras la venta de una empresa decidieron abrazar el desafío de la industrialización, en la que casi todo estaba por hacer. Su propuesta es una apuesta de bajo impacto en carbono (en madera), un sistema abierto (de proveedores y técnicos) y por último apoyado en la digitalización como eje. Desde su punto de vista hay que tener una visión abierta y mostró estar encantados de formar parte de este camino de la construcción industrializada en el que hay que ayudar a los arquitectos para diseñar con estos sistemas “disign and build”. Se centran en las fachadas si bien se puede ir poco a poco incluyendo otros elementos.

Ricardo de Pablos, CEO de Holcim, aportó interesantes datos de cómo se precisan más viviendas en las ciudades, donde va a vivir el 70% de la población y cómo se precisan 100.000 viviendas al día en el mundo para hacer frente a las necesidades; estas ciudades son responsables del 70% de las emisiones. En definitiva, se requieren grandes volúmenes de construcción por lo que se debe ir a la construcción industrializada como palanca para estos retos. En ese sentido indicó que han adquirido una empresa, Artepref, en su apuesta para trasformar y descarbonizar; así mismo la respuesta debe ser rápida, con circularidad y calidad, indicó. Para ello ya cuentan con cemento ‘verde’ con DAPs. De Pablos incidió en la colaboración desde el diseño, e insistir en la profesionalización y la formación dado que se requieren técnicos cualificados y si no, no evolucionará bien la industria.

Cándido Zamora, CEO de Exitu, expuso como su empresa familiar ha ido evolucionando para ofrecer capacidad con eficacia. Así en 2010 sacaron los primeros prototipos para construcción en altura y en 2013 cambiaron de sistema, desarrollaron elementos bidimensionales, que permiten flexibilidad. En 2016 desarrollaron el sistema Exsitu que presentaron en la feria Construtec, con un edificio de 3 plantas. Así hicieron el primer prototipo con Avintia. Indicó que el sector terciario está, para la construcción industrializada, más maduro que el de la vivienda y cómo este es un camino de eficacia, para hacer muchas viviendas con un criterio sostenible (y que siempre sea rentable a un precio asequible). En este proceso, señaló, dependemos de los promotores.

Viviendas unifamiliares industrializadas

La siguiente mesa redonda sirvió para destacar las ventajas de la construcción industrializada y conocer casos de éxito por parte de representantes de empresas que cuentan con diferentes sistemas constructivos industrializados.

La mesa “Viviendas unifamiliares industrializadas: ventajas y casos de éxito” estuvo moderada por Antonio Domínguez, presidente del consejo asesor de InMat by Ciare, quien señaló que el sector de la construcción en España está obsoleto y cómo es preciso hablar de una industria de la construcción. La construcción industrializada ahora mismo sólo supone el 2% del mercado, esa es la realidad, mientras que en Alemania alcanza el 7%, si bien otros países como Suecia es prácticamente el 100%. La cuestión es que faltan profesionales, mano de obra cualificada, por lo que “se cambiará por dolor”, porque no habrá trabajadores suficientes en un sector en el que se contabilizan hasta 35 oficios. La base de este cambio es la seriación.

Rubén Navarro, presidente y CEO de Inhaus, expuso cómo crearon hace nueve años su primera fábrica en Onteniente (Velència) aprendiendo mucho de la automoción y en la que empezaron haciendo cubos, dado que conciben la construcción industrializada con soluciones 3D, por capítulos lo que ya les ha permitido entregar 155 casas.

Un cambio hacia la industrialización

Para Navarro, en industrialización “estamos en el momento de lanzar la piedra del tirachinas”, y se debe pensar en los promotores y arquitectos. “Soy de tierra de vinos y esto es como cuando se introdujo la cosechadora: o nos metemos en la fábrica o no será posible el cambio. Solo nos faltan la financiación y cambios en la LOE. Aun así se pueden hacer mil cosas, también con operarios de otros sectores”, finalizó.

Eloi Tarrés, presidente y CEO de Evowall, indicó que buscaron un sistema híbrido basado en dos conceptos: industrialización (prefabricación) y sostenibilidad (viviendas Passivhaus), desarrollando paneles 2D con expertos en trabajo colaborativo. Señaló que en estos momentos están en un proyecto de energía positiva, dentro del proyecto Ren- Hombres y que la forma es hacer “pilotos” y pensar distinto. Ahora la construcción industrializada es más cara porque no se puede escalar, por lo que hay que superar la resistencia al cambio para resolver el problema de vivienda social, aunque suponga asumir el riesgo en un sector de pymes. Sin apoyo de capital no es posible y se necesita solucionar la financiación, dado que la industria no puede financiar a los promotores. Otro aspecto a clarificar es la normalización; esto junto con el cambio tecnológico, el reparto del riesgo y una reducción de costes permitirán a la construcción industrializada ser la respuesta al problema de la vivienda.

No olvidarse de la sostenibilidad y circularidad

Baragaño expresó que el interés es notorio y que, en su caso, son una empresa de venta de hábitats industrializados, son catalizadores que se fijan en industrias más avanzadas (como la naval), partiendo de un consorcio de innovación. Expuso cómo se entregó una vivienda en 12 semanas y destacó la importancia de la escalabilidad, en repetir, todo con sostenibilidad y circularidad. Además señaló que hay pocos fabricantes de segunda transformación aunque sí mucha industria ensambladora. En estos momentos de ‘tormenta perfecta’, de falta de mano de obra e incertidumbres, la industrialización las aplaca y puso el caso de Toyota, que en Japón hace la mitad de los edificios y cómo tienen resuelto la financiación.

Joaquim Arnau, director división de Hormipresa Living, señaló que ya cuentan con tres plantas a nivel nacional que ocupan a 400 trabajadores. Hace 50 años empezaron haciendo casas prefabricadas y ahora cuentan con el Sistema Artic Wall, un producto hibrido madera-hormigón, con placa alveolar en techo que se preocupa del medio ambiente. Mostró el ejemplo de estructura industrializada en altura que han realizado para el Hospital del Mar y finalizó indicando que debemos estar todos alineados para dar el salto de manera importante, mostrándose optimista, porque el promotor que entra por la construcción industrializada, repite. “No hay color”.

Proyectos colaborativos

Juan Francisco Rodriguez, director general de Bilba Construcciones, indicó que trabajan para grandes promotoras y cómo este sector debe ser más equilibrado, transparente y colaborativo, basado en digitalización, con proyectos colaborativos, desarrollando Colaboración Público-Privada, (como el proyecto que han desarrollado con Envisesa en Sevilla) en la que se tiene una responsabilidad compartida. Abogó por aplicar todo con sistemas de construcción industrializada y cómo lo importante es cambiar a una industria de la construcción. “O vamos a la robótica o no podremos hacer frente a la demanda”, indicó para finalizar señalando que el reto es la formación, la investigación y la divulgación, por lo han creado la cátedra Bilba para poner en valor el papel de los arquitectos.

Diseño, parámetros imprescindibles: ejemplos

Con este nombre tuvo lugar la segunda de las mesas redondas de la jornada con destacados arquitectos de nuestro país, en este caso moderada por Santiago Vela, fundador y director de SVAM quien indicó que la construcción industrializada es un motor para la regeneración urbana.

El papel del arquitecto

Diego Escario, fundador y director de Cano y Escario, señaló que estamos en marcha enfrentando este futuro en el que el arquitecto es tecnólogo pero tiene que seguir aportando ‘alma’ al edificio; en esto hay compatibilidad con la seriación. Así, los industriales lo están viendo venir, para el diseño por piezas, con singularidad. “La seriación es una parte, es algo más global en la que los arquitectos tenemos que diseñar piezas con toda libertad y reivindicar al mago que da vida a Pinocho”, señaló. En ese sentido mostró una promoción realizada con Culmia para el Plan Vive I en Madrid y cómo la Inteligencia Artificial (IA) va a transformar el sector.

Julio Touza, fundador y presidente de Touza Arquitectos, señaló que la industrialización de la construcción no es algo nuevo y cómo incluso llegó a formar parte de la primera Cátedra de industrialización en los años 70. “Esto es antiquísimo; mirábamos a la Rusia posestalinista que se estancó en arquitecturas monótonas, repetitivas; no se vio con buenos ojos acogerla”, indicó, al igual que hizo referencias a arquitectos como Sartié o Mies van der Rohe de cara a hacer arquitectura prefabricada que tiene un componente social más que artístico y que debe ser por y para el hombre: en ese sentido la clave está en la modulación (“a quien modula, Dios le ayuda” decía Mies van der Rohe) y ser repetitivo en los moldes. La prefabricación, indicó, se piensa hace mucho pero es de futuro.

Creación de una industria de la construcción

Carlos Lamela, presidente ejecutivo de Estudio Lamela, hizo una exposición basada en la experiencia de su padre y personal, y por tanto, de muchos años. Así avanzaron en hormigones preamasados, o en crear una empaquetadora de ladrillos,… “el problema es el Excel; somos los principales enemigos de nosotros mismos” y puso el ejemplo de la automoción en donde se fabrican millones de piezas: “O creamos una industria o estamos muertos. Habrá fábricas de edificios, lo que implica una inversión desmedida; España está en disposición de ello. Debe haber un impacto, crear sector. Cuando vamos a las fábricas te das cuenta del entusiasmo pero falta una dirección clara”, indicó. No sabemos lo que se nos viene con la IA y es difícil prever el futuro.

Tristán López-Chicheri, CEO de L35, indicó que los arquitectos tienen que diseñar con estos sistemas e hizo referencia a tres ejemplos: la fachada prefabricada, los baños industrializados y las propias casas, diseñadas como siempre pero que se pueden industrializar, lo que tiene un impacto en velocidad; “esto conlleva proceso de aprendizaje y alianzas”, indicó.

En su caso, están usando la IA, como cuando apareció el autocad, y es una ventana abierta a muchas posibilidades, no es una amenaza, no tiene tantos peligros por lo que hay que incorporarla y manejarla.

La industrialización acorta plazos

Carmen Sanz, directora técnica de Morph, basó su exposición en el ejemplo, en el caso de éxito de la rehabilitación del edificio del hotel Florida en Madrid. La industrialización de la fachada ha permitido acortar plazos, sin actuar en la cimentación, por lo que fue dificultosa la fase de diseño, a base de BIM, desarrollando un gemelo digital que supuso una coordinación con el resto de agentes. Sanz señaló que lo importante es no perder de vista el diseño, pero la industrialización ha supuesto, introduciendo módulos de 3×3 m (instalación de 6-7 al día), finalizar la obra de la fachada totalmente en tres meses y la completa de la rehabilitación del edificio en trece, con enormes ahorros de tiempo si se hubiera hecho con un sistema tradicional. Sanz finalizó indicando que la industrialización es clave para acelerar obras, aproximadamente en un 30% y por tanto acelerar el retorno de la inversión y ser más eficientes.

Iñigo Ortiz, fundador y socio de Ortiz-León, se preguntó en primer lugar si esta ola de la industrialización va a quedarse o va a pasar o si va a coger importancia. Desde su punto de vista esta ola es la ola y va a tener éxito por lo que supone de sostenibilidad y aportación al ciclo de vida, por lo que el todo el sector va a cambiar y se va a diseñar por piezas. “Vamos detrás del sector de la automoción y tenemos que cambiar el chip, el proceso”, indicó. Ortiz señaló el papel que van a jugar los técnicos, que deben liderar este proceso pero de otra manera, diseñando piezas (en las que será necesario justificar el carbono embebido), haciendo ‘modular architect’, una especialidad y un cambio de responsabilidades que hay que asignar. Desde su punto de vista se complica el futuro pero hay herramientas para hacer frente a los problemas, y es necesario mirar a largo plazo, y por tanto hacer edificios flexibles, que pueden cambiar su uso. Para ello se debe trabajar la transparencia, el uso de bases de datos, para introducir la IA, por la que hay que apostar para hacer diseño generativo. “Los promotores nos han de dar recursos para invertir en I+D+i”, finalizó.

Planteamientos que contemplen la industrialización

Enrique Bardají, presidente de Bardají & Asociados, expuso en primer lugar cifras de previsión de viviendas: según el INE, en 2030 se prevé una necesidad de 3,6 millones de hogares más en nuestro país, de los cuales, el 50% serán para familias. Todo parece indicar que 1,8 familias no podrán acceder a una vivienda, por lo que la regulación debería tener en cuenta estas premisas, hacer planeamiento y que se contemple la industrialización. En su preocupación por el urbanismo, incidió en empezar a pensar en el planeamiento, en el suelo y en criterios adscritos a una concepción general de industrialización. De esta forma se debe entender que debe haber una geometría modular repetitiva, (como ya proponía el arquitecto Leoz con su ‘modulo L’) y por tanto en la concepción de la vivienda, su tipología, con concepciones geométricas, dado que estamos, indicó, “en la dictadura del Excel”. En este proceso la IA debe ser una herramienta de futuro.

Construcción industrializada versus tradicional

La última mesa redonda, “Comparativa de precios de la construcción industrializada, versus la tradicional”, estuvo moderada por Josep Grimalt, CEO de GNGRUP, quien formuló a los participantes la pregunta: ¿podemos comparar ambas construcciones, industrializada y tradicional?

El precio de la industrialización

Ángel Saz, director de compras de Grupo Avintia, indicó que la comparación, a nivel de precio es un error, dado que se debe hablar de valor y tener en cuenta lo que aporta en ventajas la construcción industrializada. En ese sentido abogó por que las marcas se sumen a esto.

Jacinto Seguí, director de desarrollo colaborativo de Finsa, señaló que es un error compararlas y cómo se necesita un periodo de transición en el que se vayan introduciendo otras variantes, avanzar en procesos de transformación y cómo la construcción industrializada tiene que ser atractiva, vía circularidad, (cuestión que va a empezar a ser obligatoria en breve) y que se midan estas cosas desde el principio. En su caso, como especialistas en madera, tener en cuenta, por ejemplo, la gestión forestal y la integración de materia prima.

Una construcción más económica

Begoña López, CEO de Componentes y Unidades Constructivas, se declaró inconformista y cómo hay que hablar de precio. En esto estamos en una transición y no todo puede ser industrializado. Lo que sí es preciso es hablar de industria y pensar de otra manera. Incidió en que debe ser más económica, más barata que la tradicional en términos PEC, porque nadie paga más por hacer lo mismo y para ello se necesita ser más ágiles, eficientes y superar el miedo a lo desconocido. Hay que pensar desde el principio y definir el producto, el proceso y con un programa de producción de tal manera que los promotores y los arquitectos pierdan el miedo y se avance en hacer cosas colaborativas, híbridas, aunque esto supone decidir desde el momento cero, con un un plazo y precio objetivos. En todo este cambio también se tiene que incidir en la formación dado que se puede industrializar la construcción y para eso hay que formar a las nuevas generaciones y generar una especialización.

Conclusiones y avances

Los organizadores de la jornada clausuraron la misma haciendo un pequeño balance. Fernando Catalán de Ocón, Grupo Ciare, indicó que la construcción industrializada precisa del apoyo de subsectores para que termine de arrancar. Por su parte, Julio Brasa, Cuatrecasas, cerró la sesión señalando que este subsector requiere análisis de riesgos y cómo está empezando a ser visto como una oportunidad por parte de los fondos internacionales, aunque requiere ser tratado financieramente de otra manera, no al estilo tradicional. Por lo demás se tiene que avanzar en un ecosistema colaborativo, en normalización, en generar una industria, superar temas urbanísticos-burocráticos, contar con un marco regulatorio favorable y potenciar la formación específica.

Compartir

Entradas Relacionadas

Finsa impulsa el diseño sostenible en Madrid Design Festival

Mocha Mousse: El color del año 2025 para tu hogar

Knauf Insulation reduce un 20,2% sus emisiones de CO2

Escrito por
Últimos Números
Proarquitectura 192 Especial Aislamiento TérmicoProarquitectura 191 Especial CalefacciónProarquitectura 190 Especial Rehabilitación y Reforma