URSA refuerza su compromiso medioambiental con sello ecológico

URSA, uno de los principales fabricantes europeos de materiales de aislamiento térmico y acústico, ha actualizado su estrategia medioambiental para cumplir con las nuevas directivas europeas contra el greenwashing. La compañía, que produce materiales aislantes como la lana mineral de vidrio y el poliestireno extruido (XPS), ha obtenido el Certificado de Calidad Ambiental de la Generalitat de Catalunya, un sello de gran prestigio en España que garantiza que al menos un 60% de los materiales utilizados en sus productos son reciclados.

Este certificado, que cumple 30 años de existencia, reconoce a los productos y servicios que superan los estándares ambientales establecidos por la normativa. En un contexto de creciente preocupación por las afirmaciones ecológicas engañosas, el Certificado de Calidad Ambiental se adapta a las nuevas regulaciones europeas, en particular a la Directiva sobre las Green Claims, que está en proceso de implementación. Esta normativa obligará a las empresas a justificar científicamente todas sus alegaciones medioambientales y a evitar las afirmaciones vagas o no verificadas.

Según datos revelados en la gala del 30 aniversario del certificado, actualmente, el 53,3% de las afirmaciones ambientales son vagas o engañosas, y el 40% carecen de fundamento científico. Además, el 50% de las etiquetas ecológicas activas en la UE son demasiado genéricas, lo que hace aún más relevante la existencia de certificaciones robustas y verificables como la de URSA.

URSA apoya la regulación estricta

Durante la celebración del aniversario de la etiqueta ecológica catalana, Erika Ibargüen, responsable de Prescripción en URSA, afirmó que la saturación del mercado con comunicaciones de greenwashing hace fundamental que las empresas justifiquen de manera explícita sus afirmaciones sobre sostenibilidad. Según Ibargüen, el endurecimiento de los requisitos para las etiquetas ecológicas garantizará que solo se comuniquen de manera veraz las características medioambientales de cada producto.

El Certificado de Calidad Ambiental es reconocido por su fiabilidad y transparencia, y cumple con las exigentes normas internacionales ISO 14024, que regulan los criterios para la certificación de productos y servicios con altos estándares medioambientales basados en el ciclo de vida.

El impacto de la certificación en el mercado

En la actualidad, más de 260 empresas y 1.500 productos están certificados con este distintivo, que se ha consolidado como una herramienta clave para ofrecer al consumidor datos precisos y verificables sobre las credenciales medioambientales de los productos. En un mercado saturado de mensajes sobre sostenibilidad, URSA se compromete a proporcionar información clara y concreta sobre el uso de materiales reciclados, lo que resulta esencial tanto para la marca como para los clientes, quienes se enfrentan a una avalancha de publicidad medioambiental.

La Generalitat de Catalunya también está trabajando en una actualización del decreto que regula este sistema de calidad ambiental, con el objetivo de simplificar su gestión, pero sin comprometer la rigidez de los criterios medioambientales que lo respaldan.

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