El proyecto fue adjudicado a través de un concurso internacional donde el mayor énfasis estuvo en diseñar un edificio sostenible, como mayor preocupación, las altas temperaturas de la región de Extremadura y evitar la radiación solar. Estos temas se tuvieron en cuenta desde la fase de concepción del plan a través del análisis de diferentes estrategias con el fin de lograr mayor número de zonas de sombra, utilización y ventilación natural, y la búsqueda de sistemas naturales para la refrigeración del conjunto de edificios.
La actuación más destacada es la construcción de un gran edificio que alberga a seis consejerías (Cultura, Fomento, Desarrollo Rural, Bienestar Social, Sanidad y Consumo y Educación) sobre una superficie construida de 62.975 metros cuadrados, de los que la mitad, unos 38.000 metros cuadrados, están destinados a las oficinas administrativas. Tiene sótano, planta baja y cuatro pisos de altura.
Además, para aparcamiento se destinan 10.100 metros cuadrados, divididos en dos plantas, que tienen capacidad para estacionar 666 vehículos.
ILUMINACIÓN
El estudio de la iluminación natural permitió definir las condiciones de confort visual. También permitió marcar las estrategias de iluminación conjugada para obtener un adecuado rendimiento energético en la integración de los sistemas de luminarias en función del aprovechamiento de la luz natural, a partir del diseño de circuitos de lámparas por zonas, diferenciados para cada una de las plantas del edificio.
En la fase final del proceso se determinaron las posibles zonas dotadas de circuitos independientes que constituyen el sistema final de iluminación conjugada de luz artificial como apoyo de la luz natural.
Un sistema de gestión de luz regula la luz artificial en función de la cantidad de luz natural disponible, garantizando un entorno de trabajo agradable y generando unos importantes ahorros económicos, ya que el excedente de luz se regula automáticamente.