Se ha llevado a cabo siguiendo los principios de racionalidad y economía, tanto desde el punto de vista espacial como en lo referente a los materiales. La organización del programa se lleva a cabo en función del grado de atención al público y accesibilidad. Para ello, se organiza el acceso a los distintos espacios de atención al público a través de un núcleo de comunicación, resolviendo, de manera clara, el acceso a los mismos. Así mismo, se pretende crear la mejor, más rentable y racional organización estructural.
Este objetivo persigue, en definitiva, una concepción integrada de soluciones distributivas, estructurales y constructivas que permiten optimizar los recursos económicos existentes para mejorar tanto las condiciones de utilización del edificio (por tamaño y flexibilidad) como los servicios de que disponga (tanto en instalaciones como en soluciones constructivas perdurables).
El Edificio de Servicios Comunes Judiciales se desarrolla en cuatro plantas sobre rasante, semisótano y sótano. Las medidas de seguridad condicionan la utilización de la nueva edificación, por esta razón, el acceso se mantiene en la edificación existente, a pesar de contar con uno propio. Con esto, desde la Avenida Huertas del Sacramento se realiza el acceso a nivel de la planta baja a un gran vestíbulo común a ambos edificios, vinculado física y visualmente con el nuevo volumen, lo que facilita la conexión hacia el mismo a través de una galería cerrada.