No hace mucho tiempo, el sector de la construcción sufrió uno de los peores momentos, obligando a todos los agentes a llevar a cabo una reordenación del mercado en la cual la reforma y la rehabilitación ganaron mucho más peso del que tenían hasta el momento. Ahora, tras unos meses de duro confinamiento, donde las personas han podido disfrutar y ‘sufrir’ sus viviendas, el sector de la rehabilitación ha vuelto a posicionarse en los primeros puestos, al vislumbrar las carencias de nuestros edificios donde hemos pasado muchas horas. Además, debido a las nuevas medidas de higiene y de distanciamiento social, ha surgido una nueva manera de hacer arquitectura teniendo presente estas características, algunas de las cuales han llegado para quedarse.
La crisis sanitaria de la que hemos sido testigos durante estos largos meses ha puesto de manifiesto determinadas carencias en nuestros edificios. Se ha impuesto la necesidad de contar con espacios exteriores, así como la búsqueda de construcciones de consumo nulo y que sean respetuosas con el medioambiente. Además, debido a la existencia de este virus se han impuesto condicionantes que antes no existían a la hora de abordar un proyecto, tales como la distancia social, así como plantear nuestras viviendas como puesto de trabajo. En este entorno, el sector de la rehabilitación y reformatiene un gran potencial, pues junto a la gran cantidad de edificios construidos antes de 1980, los cuales son auténticos vampiros de energía, el sector debe hacer frente a…