La arquitectura ha ido evolucionando conforme han ido pasando los siglos, a veces se ha visto influenciada por cambios culturales, por nuevas formas de pensamiento o por avances tecnológicos.
Uno de los enfoques más innovadores es, precisamente, el diseño paramétrico, que está claramente marcado por sus complejas formas adaptativas, transformando el paisaje urbano que lo rodea y desafiando los límites de lo posible en su construcción.
¿Qué es la arquitectura paramétrica?
La arquitectura paramétrica utiliza parámetros variables para generar formas arquitectónicas que se caracterizan por ser complejas y flexibles. En los métodos tradicionales, el arquitecto dibuja un edificio directamente, pero en la arquitectura paramétrica se emplean modelos y algoritmos matemáticos para poder manipular las formas. En estos parámetros se pueden incluir variables como el clima, la orientación, el uso de materiales o incluso datos del comportamiento humano.
En qué consiste el diseño paramétrico
El diseño paramétrico está basado en un proceso de creación iterativa, esto significa que es un proceso que se repite varias veces con la finalidad de mejorar o refinar un resultado. El arquitecto llega a este punto estableciendo relaciones matemáticas entre los elementos de los edificios.
Estos elementos que utilizan los arquitectos para poder crear edificios paramétricos se vinculan a unos parámetros específicos que se pueden modificar, influyendo así en el diseño final. Realizar una pequeña alteración en los datos de entrada puede hacer que haya grandes cambios en la forma y en la función del edificio.
Por ejemplo, un edificio puede ser diseñado para que su fachada se ajuste de forma dinámica a diversos factores como podrían ser la luz solar, las temperaturas… Si se modifican estos parámetros, el software genera una especie de posibles configuraciones que responden a las condiciones del entorno, optimizando así la eficiencia energética, el confort de los usuarios o la propia estética del edificio.
El enfoque del diseño de la arquitectura paramétrica es no lineal y adaptativo, puesto que no sigue una forma definitiva ya que lo que se busca es generar múltiples variantes en función de las relaciones paramétricas establecidas. Además, estos edificios suelen estar equipados con tecnología moderna y con los mejores servicios de alarma del mercado para su protección.
Diferencias entre la arquitectura paramétrica y la arquitectura tradicional
La arquitectura paramétrica se diferencia claramente de la arquitectura tradicional porque esta se caracteriza por tener un diseño mucho más lineal, con formas predecibles y se rige por principios que se han ido estableciendo a lo largo de la historia.
Estas son las principales diferencias entre la arquitectura paramétrica y tradicional:
- El diseño: La arquitectura tradicional se basa en principios de diseño estandarizados y muchos de ellos tienen raíces históricas, como son el estilo gótico, barroco o renacentista. Está centrado en la simetría y las proporciones fijas. Al contrario que la arquitectura paramétrica, que se centra en crear diseños que se adaptan al entorno y no son los arquitectos los que diseñan cada elemento.
- Estética y forma: La arquitectura tradicional está compuesta de formas geométricas y simétricas, además, los materiales que se emplean para su construcción son convencionales, como piedra, ladrillo o madera. La arquitectura paramétrica tiene una estética que tiende a lo curvo o fluido.
- Proceso de construcción: En la arquitectura tradicional el proceso de construcción sigue una metodología que está basada en reglas arquitectónicas y en el uso de técnicas de construcción que son conocidas, en cambio, la paramétrica está basada en la fabricación digital, utilizando impresión 3D y corte CNC que ayudan a la realización de formas complejas.
- Relación con el entorno: La arquitectura tradicional no necesariamente responde a variables del entorno en tiempo real, se puede adaptar, pero su forma es fija. En cambio, la paramétrica está pensada para que forme parte del propio entorno.
- Flexibilidad y personalización: Aunque la arquitectura tradicional permite que se realicen variaciones, las modificaciones que se realizan suelen ser limitadas, ya que normalmente estos diseños son rígidos. Por el contrario, la arquitectura paramétrica es muy flexible, ya que un pequeño cambio puede generar muchas variaciones de un diseño.
La arquitectura paramétrica supone un cambio a la hora de concebir el espacio y las formas como se venía haciendo hasta ahora. Gracias a tener un enfoque que está basado en los algoritmos y la manipulación de muchos parámetros, se pueden crear diseños que son complejos y únicos, que además, responden a demandas tecnológicas y también estéticas.
