El estudio Lemobba Architects & Designers ha sido el escogido para el diseño de una vivienda en el Barrio Salamanca de Madrid, en el que se llevó a cabo una reforma completa del ático, situada a escasos metros de la plaza del Marqués de Salamanca en un edificio protegido de 1902.
Uno de los primeros retos ante los que se enfrentó el estudio fue que era una vivienda muy compartimentada y con ventanas muy pequeñas. Lo que supuso que para poder llevar a cabo el acondicionamiento de la nueva distribución, y fue necesario fabricar y reemplazar casi el 70% de las vigas del forjado, ya que los pesos en la vivienda iban a ser diferentes.
Este remplazo, fue precisamente una de las cuestiones que complicaron el proceso, pues era dificultoso el transporte de dichas nuevas vigas metálicas con unas dimensiones de casi 3 metros de largo.
Las claves del proyecto de Lemobba Architects & Designers
Como se comentaba anteriormente el proyecto supuso una redistribución de los espacios. Las zonas comunes se distribuyeron en un gran espacio diáfano, para darle sensación de mayor amplitud. Así mismo uno de los principales objetivos y requisitos del cliente era tener mucha luz natural, por lo que el estudio se basó en las técnicas egipcias de iluminación. En este sentido, se diseñó y fabricó en el estudio las dos paredes enteras de espejos del salón/comedor, como reflectores de luz. Y, además, en el caso del espejo envejecido del salón, se diseñó pieza por pieza, indicando donde se querían las manchas y los dibujos del envejecido.
La vivienda está repleta de reliquias, como la mesa de comedor en mármol rosa portugués, rescatada del Rastro de Madrid. Las alfombras del salón y del comedor están diseñadas en el estudio y ambas son de lana virgen hecha a mano. Y las jardineras de la terraza son diseñadas en el estudio en acero corten con un metalista artesano de Toledo.
Las dos habitaciones de las que dispone el ático, han sido diseñadas cuidadosamente. Desde los armarios de obra con detalles de cuarterones y revestidos en polipiel, hasta el diseño de los cabeceros, con marcos dorados o retapizados.
En cuanto a la cocina, fue diseñada y fabricada en el estudio.
Y respecto al cuarto de baño de color mostaza, a pesar de no ser de gran tamaño, se quiso prestar especial interés en los materiales. La pared revestida en espiga de la ducha fue diseñada y fabricada a medida con una empresa de Valencia. De cada pieza se sacó un molde y se bañaron en oro, cobre y plata.
Tanto el mueble lavabo de este baño, como el del cuarto de baño naranja, fueron necesarios cuatro gremios para llevarlos a cabo. Desde la carpintería para la estructura interior, el tapicero para el frontal de los cajones, el marmolista para la encimera, y el metalista para la estructura principal.