Sin lugar a duda, el invierno es la época en la cual se gasta más dinero, el momento de poner la calefacción nos genera un gasto extra, y más en la actualidad con el precio de la energía por las nubes. Se trata de un equipamiento básico y esencial, se ayudará a los usuarios a conseguir un adecuado confort. Por esta razón, las distintas empresas han dedicado sus esfuerzos en crear multitud de sistemas para conseguirlo, poniéndose en el primer punto a lograr la mejora de la eficiencia.
El mercado de los sistemas de calefacción, como en la mayoría de los sectores de la construcción, está muy ligado a los devenires del sector de la energía, sector que, en estos momentos, se encuentra algo desatado, con precios sobreelevados y posible carestía de cara al invierno. No obstante, según el Informe del mercado de la calefacción 2021, “el mercado de la calefacción tuvo un crecimiento del 30% en el año 2021, lo que significa una facturación de unos 900 millones de euros. Según datos encontrados en la red: Actualmente, la eficiencia energética está a la orden del día, así como la reducción de emisiones de CO2 y la descarbonización de los edificios al utilizar sistemas con fuentes de energía renovables y con bajas emisiones. Aquí también juega un papel importante el objetivo de la UE de reducir emisiones netas de gases de efecto invernadero en un 55% para el año 2030”, define Xènia Perarnau, Comunicación y Márketing de Loxone.
Pero como se ha comentado, y explica Santiago Perera, de Eurofred, asegura que vivimos tiempos inciertos y el mercado de la calefacción se adapta a las nuevas necesidades. “El consumidor final es más consciente de la importancia de la eficiencia para asegurar el ahorro en la factura del hogar y reflexiona…