Qué es lo primero que analiza Juan Carlos Cardenal cuando se enfrenta a un nuevo proyecto? Desde su punto de vista, ¿Qué principales valores debería primar a la hora de proyectar un edificio? (funcionalidad, eco-eficiencia, sostenibilidad, precio, relaciones humanas…)
Yo diría que los valores que interesan en primer lugar a la hora de enfrentarse a un proyecto son los que se refieren al ENTORNO: urbano, histórico-cultural y socio-económico; seguido, muy de cerca, por un planteamiento funcional y sostenible, aspectos inseparables e inherentes a todo desarrollo arquitectónico.
Además, estas tres características tienen mucho que ver también con la economía y la racionalización de los medios disponibles.
Considerando la faceta multidisciplinar de su estudio –igual realizan rehabilitaciones como proyectan edificios de nueva construcción, docentes, administrativos, residencial…, ¿tiene alguna predilección por alguna tipología en particular?, ¿Qué opina sobre la especialización?
Los proyectos de rehabilitación y reforma suelen ser ejercicios más delicados, pero muy coherentes con el período actual en el que nos encontramos. Por otro lado, la construcción de edificios de nueva planta puede generar mayores posibilidades para la innovación y desarrollo de nuevas ideas tipológicas.
Así mismo, la especialización es un concepto que viene de Europa y el mundo anglosajón, una opción muy interesante para generar negocio en el sector, pero la figura del Arquitecto, por lo menos en nuestro país, está marcada por un carácter multidisciplinar y polivalente, a veces poco conocido, pero que no se debiera de perder.
¿Qué compromisos debe tener un arquitecto con la sociedad? Y, ¿la sociedad con la Arquitectura?
Se trata de una relación permanente y bidireccional, cada vez más pública, donde el arquitecto adquiere la responsabilidad de transformar un lugar o crear otros nuevos, siempre tratando de aportar algo a la ciudadanía.
De la misma manera, la sociedad debe valorar el trabajo que se desarrolla en un estudio ya que no somos un producto terminado que se pueda adquirir o comprar en un escaparate, sino que estamos prestando un servicio y una dedicación que, en muchas ocasiones, trasciende elámbito meramente profesional.
Actualmente, ¿Cuál debe ser la apuesta de un estudio de arquitectura? ¿Se encuentra en la internacionalización el futuro del sector? O, por el contrario, ¿es la rehabilitación y la reforma el campo sobre el que se debe apostar más?
Desde nuestra experiencia en ARQUIPLAN 2.0 pienso que ambas opciones son compatibles, se retroalimentan entre sí. Las nuevas comunicaciones han permitido que podamos proyectar para lugares lejanos en un mundo global, pero no podemos dejar de cuidar nuestro entorno local; rehabilitar el patrimonio que conocemos ayuda a comprender también otras culturas diferentes, de manera que podemos adaptarnos a la arquitectura en otras ciudades con el conocimiento que corresponde.